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Detrás de una feminista

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Miércoles 07  de Octubre del año 2015. Me encuentro en la oficina de la directora del programa  de diseño gráfico de La Universidad Los Libertadores, Alejandra Almonacid, una mujer decidida con una perspectiva diferente que llama la atención. Con ella acordamos una cita a las 4:00p.m. Para hablar del feminismo desde el enfoque educativo, primero quiero resaltar la forma de ser de esta mujer desde mi punto de vista, después de conocer un poco a fondo la vida de esta artista plástica que por medio de una maestría  sobre estudios de género le  dio  un giro de ciento ochenta grados a su vida. Me doy cuenta que esta mujer tiene un espíritu revolucionario pero al mismo tiempo su nobleza atenúa el radicalismo de esta forma de pensar, es por esto que llego a la conclusión que las apariencias engañan.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El trípode en su lugar, la cámara encendida simboliza que la entrevista dio inicio. Aunque yo tengo preguntas formuladas sé que detrás de todas ellas, mi interés por la historia de esta mujer hará nacer nuevas preguntas.  Quiero iniciar contándoles o dándoles una descripción de cómo es María Alejandra Almonacid. El cabello corto azulado resalta el perfil de una mujer contemporánea con clase, su cuerpo delgado hace que su edad se encubra, haciéndola ver más joven. Aunque su estatura es baja, sus tacones color negro la hacen ver estilizada y con buena postura. Por lo que me pude dar cuenta, ella se inclina por los colores pasteles y el estilo Vintage que está muy de moda en los últimos años.  

 

Es justo decir que su escritorio durante todo el transcurso de la entrevista estuvo ordenado. Lleno de colores algo que de una artista es muy común. Alejandra o la ‘’profe’’ como es conocida, llevaba las uñas color pastel y un collar de perlas blancas que durante el tiempo que estuvimos hablando no dejo de manipular. Ahora bien, pude descifrar que María Alejandra Almonacid se inclina por la música Indie y brasileña.  Lo deduje porqué su forma de expresar y de hablar es muy espiritual por eso que le pregunte,  acertadamente me respondió que sí, quiñando el ojo  con un observación que  le gusta la música tranquila.

 

Listas ya para iniciar la conversación, el obturador de la cámara es oprimido, es cuando le hago la primera pregunta, ¿Alejandra para usted que es el feminismo?. ‘’Yo creería que el ser feminista no es como una decisión que se toma de un día para otro, sino que es un proceso de vida que lo  va llevando a uno, a entender el mundo de otra manera’’. Estas palabras me hicieron erguir miles de pensamientos que tenía guardados hace mucho tiempo. Alejandra se refirió a este pensamiento con mucho carácter y costura. Haciendo que su gesticulación ayudara a darle fuerza y dinamismo a su comentario. Cabe señalar que desde esa observación dio inicio a la entrevista que término siendo una charla muy productiva tanto para ella como para mí.

 

Paralelamente reconozco que Alejandra Almonacid decidió ser feminista, como lo decía ella, por qué  ha pasado por situaciones personales que requieren cerrar etapas. Contrajo matrimonio a los 22 años de edad, pero hace un par de años se divorció. Reconoce que lo hizo muy joven, sin embargo esta decisión la llevo a buscar la paz interior que tanto había anhelado. Por otra parte mientras le preguntaba detalles de su vida, me llamo mucho la atención su expresión de serenidad, cuando sus labios evocaron la frase: ´´hay cosas que como mujer no se pueden negociar y que por esencia no se pueden dejar al azar, hay que hacer resistencia desde donde se pueda’’.

 

 Hablamos un poco de cómo inicio su vida en el feminismo, movía sus manos para hacer más amena la conversación. Es más, siempre estaban en constante movimiento. Para Alejandra la literatura y las referencias artísticas fueron una gran herramienta que la ayudaron a entender y  acercarse al feminismo. Permitiéndole indagar y hacerse un análisis del ser mujer. En un momento de su vida María Alejandra mantuvo una energía política que la llevo a tomar muchas decisiones que directa o indirectamente trajeron consecuencias a su vida. Pero cabe resaltar que esta energía se fue apaciguando con el paso del tiempo y se ha convertido evidentemente en una forma de vivir y algo que hace parte de ella. Durante tres largos años, María Alejandra mantuvo una relación activa con un blog que en el cual contaba su vida y sus experiencias desde el feminismo. Le pregunte por qué lo había cerrado, con una sonrisa perspicaz y el movimiento de sus manos que tanto la caracterizan respondió ‘’ fueron momentos que llegan a la vida de una mujer en donde se tienen que cerrar etapas e iniciar  nuevos proyectos y  al escribir en el, no permitía darle un clausura definitiva a estas’’.

 

Me surgían miles de preguntas para la directora Almonacid que evidentemente no me podía responder por la falta de tiempo, mirando el reloj calculaba cuantos minutos nos quedaban. En un momento de la entrevista le pregunte si en la universidad existía el machismo, ya que todo el mundo lo ve como lo contrario al feminismo. Ella agrega un gesto de nobleza y manifestó ‘’ En toda institución e organización que contenga un contexto humano se tiene un referente a algo más grande,  entonces evidentemente considero que si lo está presente’’. Fue interrumpida por el tono del teléfono, se inclinó hacia el escrito, con un guiño pidió disculpas y levanto la bocina que particularmente era negra y tenía una flor de colores. 

 

Habría que decir, que  antes de ingresar a la oficina, María Alejandra se encontraba  en una reunión donde al finalizar todos se despidieron de hasta luego doctor, doctora, a ella simplemente le dijeron profe, cuando su posición de Directora del programa de Diseño grafico la hace referente al no ser llamada de esta manera si no de otra. Le pregunte que si esto le molestaba me respondió con una carcajada sutil y llevándose las manos a tocar su collar de perlas ’’Para mí no es importante, es mas a mí me gusta que  me digan profe’’.

 

El movimiento femenino en Colombia se ha manifestado en la forma de comités ligados a los movimientos y luchas de las masas, así por ejemplo ligados estrechamente a las organizaciones sindicales campesinas y populares de los barrios tanto en el período de la violencia como en los ‘’años locos’’ de los 60’s. Con la disipación de los partidos se esfumo también el movimiento femenino. Sólo subsistió en la ANUC (La Asociación nacional de Usuarios Campesinos de Colombia)  hasta mediados de los 80 y en  la orientación socialdemócrata, burguesa de un país como Colombia. Cabe resaltar que, en las centrales obreras y en algunos sindicatos figura la secretaría de la mujer, pero su movimiento entre las masas de las mujeres es nula,  sometida a encuentros donde mucho se hablaba y poco se hacía y sobre todo, donde se ponían en primer plano los problemas de género, contribuyendo con ello a desviar el blanco de lucha de las proletarias (Archivo histórico, 1996).

 

Después de todo esto por fin pude hacer la pregunta principal de toda esta entrevista, ¿María Alejandra, según su concepto ¿Cuál es la noción que existe en la universidad de feminismo, es errónea? Ella me mira con un gesto aplacado y responde con un comentario muy sereno que la caracteriza ‘’ yo pienso que es un tema que no existe, que a nadie le interesa, es un tema que no tiene valides en nada porque aquí está superado’’.  Entre tanto menciona que el feminismo en ningún momento trata de opacar al hombre, evidentemente no tiene que ver nada de eso, el feminismo busca reivindicar lo que se tiene que reivindicar, lo más valioso que tiene el feminismo es que es una herramienta que permite abrir el universo,  comprender la forma en que funciona el mundo desde una perspectiva más  humana   reconociendo las particularidades de cada persona sea hombre o mujer.

 

Al mismo tiempo  el feminismo tiene diferentes significados según Owen M. Fiss, no es una teoría acerca de la igualdad. En otro nivel, más general, es una teoría acerca de la objetividad en ambas versiones. El feminismo representa un desafío profundo a las tradiciones políticas y jurídicas establecidas, pero también  existe un conflicto entre estas dos versiones del feminismo y este conflicto debe ser reconocido. El feminismo igualitario está en conflicto con su epistemología radical y finalmente uno deberá ceder ante las otras versiones del feminismo y este conflicto debe ser reconocido.

 

La conversación estaba culminando y para despedirme le pregunte María Alejandra ¿Su familia qué opinaba sobre todo este ciclo tan repentino en su vida cuando decidió ser feminista?.  Con una enorme sonrisa y batiendo la cabeza de un lado otro, como si se hubiera recordado de alguna situación en particular, me responde ‘’ Mi familia al comienzo se tornó negativa, pero el feminismo me dio esas herramientas  para poder combatir todos los comentarios y ver todo de un lado muy espiritual’’. Me dispongo a levantarme del lugar donde estaba sentada. Oprimo el obturador de mi cámara y doy por terminada la grabación. María Alejandra con un gesto de amabilidad me dice que le agrada que nosotras como estudiantes nos interesemos por estos temas que son poco tocados en los últimos años en las universidades. Con un tono cáustico en su voz, afirma que sería interesante que la Universidad creara un grupo que apoyara al feminismo y le diera otra cara, donde todos fueran participes de actividades que educaran e integraran a los estudiantes de la facultad de comunicación.

 

Saliendo de la oficina de la Directora Almonacid. Sujetando mi trípode puede observar que se acercaron dos estudiantes a la oficina de María Alejandra, tal vez por temas académicos. Tome la decisión de esperar a que salieran de la oficina y preguntarles que según su punto de vista como percibían  a la directora Almonacid. Los dos estudiantes aceptaron, Camilo Bernal de octavo semestre de diseño y  Santiago Márquez de quinto me respondieron ’’la profe siempre ha sido buena persona, nos daba referentes en clase, es una profe que tiene muchos conocimientos, las clases de ella eran motivadoras nadie tuvo problemas con ella, es más valoraba los trabajos de cada uno de los estudiantes’’ De igual manera Santiago Márquez estudiante de quinto semestre dijo ‘’ es una profesora muy integral  en lo que hace, es buena profesora, motiva a los estudiantes a salir adelante no solo académicamente si no  personalmente,  porque todo el tiempo está velando por la integridad de sus estudiantes’’.

 

Es por eso que decidí preguntarles a los hombres  que si ellos se consideraban feministas o no. Muchos respondieron que si creían en la igualdad de género pero que no se consideraban feministas como fue el caso de Erick Moreno estudiante de 19 años de piel trigueña y de estatura alta, afirma  ‘’yo sí creo en la igualdad de género, porque me parece que es como justo para hombres y mujeres, pero no soy feminista’’. Existen hombres que tienen como referente al machismo desde su concepción de la vida, el aceptar ser feminista podría ir en contra a sus ideologías o  su masculinidad. Camilo Bernal  estudiante de 22 años con un aspecto poco particular que pertenece al movimiento rastafari, afirma con un tono concluyente  ‘’si creo en la igualdad de género, no soy feminista como tal, si apoyaría seria participe pero no sería un líder’’.

 

 

 

Finalmente quiero apuntar que las mujeres en pleno siglo XXI han tomado tanta fuerza a pesar de ser una figura delicada y tranquila. Han sabido llevar el tema de ser mujer transbordando así la esencia. Logrando demostrar que detrás de un rostro lindo, existe un universo donde la igualdad y la creatividad es el centro de todo. El ser feminista en ninguno de los casos quiere atentar con la integridad y la moral de un hombre. Al contrario el feminismo lo único que quiere es reivindicar el papel de la mujer en la sociedad y abrir escenarios donde prima  la igualdad para los dos sexos.

 

 

Redactada por: Vanessa Burgos

 

 

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